Esta casa está ubicada en un condominio residencial cerrado y lejos del centro urbano de la ciudad. Este es el barrio Park Way, cuya ocupación predominante es de viviendas unifamiliares. El objetivo del proyecto, en línea con los intereses de los propietarios, era construir una casa de una sola planta con bajo costo de ejecución, con el fin de ocupar adecuadamente una gran parcela de terreno, a 42 m de frente y 43,5 m de lateral.
La implantación se realiza a partir de un solo volumen, un prisma rectangular, colocado cerca del frente del lote y paralelo a la calle. De esta forma, se promueven dos relaciones deseadas: una con la calle, más austera y controlada, y la otra con la densa forestación al fondo del lote, ésta, más generosa y abierta.
Obedeciendo a una rígida modulación estructural, basada en vanos que varían entre 3, 6 y 12 metros, se dispusieron los ambientes internos, así como algunos vacíos, con la función de sectorizar el programa, crear jardines internos y establecer relaciones con la calle y los jardines exteriores. La modulación estructural, asociada al uso de la técnica de construcción más tradicional, en el dominio del conocimiento de la construcción local, resultó en un bajo costo de construcción, lo que ayudó a lograr una de las premisas importantes del diseño.