La Casa SAN se encuentra en un edificio clásico del centro donostiarra, en uno de los tan característicos chaflanes del ensanche del siglo XIX del arquitecto vasco Antonio Cortázar. Se trata, al igual que el resto de las construcciones del centro, de un edificio ejecutado a base de estructura de madera y fachadas de piedra arenisca de las canteras de Igeldo, seña característica de las casas del ensanche donostiarra.
Seis balconeras y un gran mirador a calles principales y otras tres ventanas al patio interior del edificio, aportan luminosidad a toda la planta. Siendo su uso original el de vivienda, pasó a ser clínica y después de casi cuatro décadas vuelve a su función inicial, pero esta vez de una forma más espaciosa, luminosa y confortable.
Objetivos/estrategia. El objetivo a la hora de iniciar el proceso era claro, además de crear un hogar acogedor y con personalidad, la Casa SAN debía ser un hogar amplio, luminoso, con un nivel de confort alto, eficiente energéticamente y accesible. La estrategia adoptada se basa en desnudar la estructura y los elementos originales de la casa, mostrando su esencia y destacándolos sobre un espacio en blanco que los acoge. Una dualidad entre la imponente presencia de lo existente y el minimalismo de lo nuevo, debido al uso de puertas y zócalos enrasados, herrajes ocultos y falta de manillas.
Pilares y vigas de madera y la piedra descubierta en el mirador, dialogan con obras de arte y mobiliario como el de la cocina, diseñado por AAA (amaia arana arkitektura) exclusivamente para sus propietarios. Materiales nobles, como la madera de roble o el mármol, y una cuidada iluminación acaban de crear una atmósfera cálida y acogedora.
Programa/distribución. A la planta de 120 m2 se accede desde un espacio de entrada que continúa con el amplio espacio central de día compuesto por cocina, comedor y zona de estar, que, gracias a la cantidad de huecos a fachada con los que cuenta, recibe luz durante todo el día. A cada lado, se sitúan dos dormitorios de amplias dimensiones. Las estancias húmedas, tales como los baños y el espacio de lavandería, se ubican cerca del patio interior, dejando los espacios a fachada para las estancias más nobles.
Confort, Eficiencia energética y accesibilidad. La vivienda apuesta por estrategias de eficiencia energética y confort, contando con una completa rehabilitación de su envolvente y sistemas novedosos como, por ejemplo, el techo radiante Zehnder Nestsystems, con un mayor rendimiento y menor inercia térmica lo que supone una mayor velocidad de respuesta que otros sistemas. Además, el apartamento es totalmente accesible, tanto en cada estancia como en la entrada, en la que el cambio de altura de pavimento para llegar al resto de la casa se resuelve mediante una rampa de pendiente suave.